
Mi jefe en el trabajo me llama a veces a su oficina porque hemos estado follando. Su mujer está loca, así que no tengo ningún problema en rebotar sobre esa polla cuando él quiere. Viene al trabajo con alguna historia nueva sobre cómo ella lo está volviendo loco y esos son los días en los que sé que está en marcha. Me dice que quiere olvidarse de ella por un tiempo y tener un coño joven y apretado sobre su polla es una manera perfecta de hacerlo.
La última vez que esto pasó, me llamó a su oficina justo al comienzo de mi turno e inmediatamente me inclinó sobre el escritorio para poder penetrarme por detrás. Me encanta cuando me toma como si no le importara, así que gemía y me retorcía con todo lo que me hacía. Me folló tan fuerte que mis dedos de las manos y de los pies se curvaron cuando me corrí sobre su polla, y me estremecí durante mi orgasmo mientras descargaba su semen en mi apretado canal.
¡Su esposa estando loca garantiza que yo tenga una gran polla todo el tiempo, así que no me quejo!